Debussy: La Mer, Le Martyre de Saint Sébastien
Description
2018 marks the centenary of the death of Claude Debussy. Considered by some to be the father of modern music, Debussy’s highly original system of harmony and musical structure expressed in many respects the ideals to which the Impressionist and Symbolist movements of his time aspired. Alongside two shimmering masterpieces, La Mer and the celebrated Prélude à l’après-midi d’un faune, the Symphonic Fragments from Le Martyre de saint Sébastien receive loving attention from the distinguished musicians of the Philharmonia Orchestra – making their harmonia mundi label début – conducted by Maestro Pablo Heras-Casado.
International release: July 6, 2018
Critical acclaim
“Heras-Casado brings Boulezian analytical textures to the Saint Sébastien fragments and La Mer, but his emotional engagement in this music is far less restrained. The playing is magical.”
“Heras-Casado ist einer jener raren Dirigenten, von denen Energie und Leidenschaft ausgeht, ohne dass Übersicht und Sorgfalt im Umgang mit dem Klanggeschehen oder der Kontakt mit den Musikern leiden.”
Süddeutsche Zeitung
“In a recording made and released this year, Pablo Heras-Casado and the Philharmonia Orchestra offer a dazzling array of varied textures, with crystal-clear ppp timps at the beginning of i, a consistently active blend of timbres throughout the whole of ii and an impactful bass drum in iii, the work’s grand finale vying with the best for visceral excitement.”
Gramophone Magazine
“Heras-Casado figura notoriamente en la primera línea de las batutas actuales. Su solidez técnica, su imaginación de intérprete, su versatilidad estilística acreditan su situación. Por fortuna, las casas discográficas le hacen sitio en sus catálogos. En la presente entrega se las ve con un compositor que permite lucirse a un buen director de orquesta, o plantearle un desafío que lo hunda. Heras-Casado pertenece brillantemente a la primera categoría. Se vale de una lectura de una ejemplar pulcritud, se diría que microscópica, unida a un fraseo realmente bordado, una lujosa especulación de timbres, un manejo de los efectos de instrumentario y, diría que en primer término, un sentido del canto que extrae de las pasajeras células melódicas o los grandes y expansivos arcos, un sostenido y variadísimo lirismo.
Hay, si cabe, dos grandes maneras de encarar la orquesta debussyana. La tradición Stokowski despieza la partitura en busca de la claridad, a la vez que dispersa el fraseo como si Debussy hubiera dejado escrito un rompecabezas de preciosas minucias. La tradición Toscanini, en cambio, afronta la unidad sin perder un obsesivo gusto por el detalle. No ve a Debussy como un dispersador de miniaturas sino como un narrador.
Heras-Casado se apunta con felicidad a esta segunda opción. No sólo en el Preludio y el San Sebastián, que son músicas de asidero literario, un poema de Mallarmé y un drama de D’Annunzio. También lo hace con El mar, donde nos ofrece una historia dramática, plena de episodios contrastados de acción y reflexión, de placer y amenaza. Es una historia abstracta, a la cual el escucha ha de poner localización y personajes. Nada sería posible sin el concurso de la suntuosa Philarmonia, digna de su director en la ocasión. Debussy sin ella sería una preciosa planta exótica sin agua. Es digna de su eminente jardinero.”
Scherzo